La Legión de Cristo tiene nuevo Director general! Se trata del sacerdote mexicano Eduardo Robles Gil. Las votaciones donde se llevó a cabo la elección del P. Eduardo fue realizada el día 20 de enero, sin embargo, se necesitaba la confirmación de la Santa Sede. Esta mañana el Arzobispo José Rodríguez Carballo, O.F.M., secretario de
la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida
Apostólica ha comunicado personalmente la confirmación de la Santa Sede de las
elecciones. Dada la elección y confirmación del nuevo Director general de la Legión de Cristo, el mandato del P. Álvaro Corcuera, (quien
por motivos de salud no ejercía el cargo desde octubre 2012 y fue sustituido en
sus funciones por el P. Sylvester Heereman, LC.) finaliza.
Hoy también los padres capitulares que representan a toda la Legión de Cristo, han hecho un sincero y esperanzador comunicado en el
que la Legión de Cristo se posiciona de forma conclusiva sobre su fundador, y
en el que refiere algunos de los pasos que se han dado en el proceso de
renovación.
Comunicado del Capítulo General Extraordinario de los Legionarios de
Cristo
1. El Capítulo General Extraordinario, reunido en Roma bajo la
presidencia del Delegado Pontificio, Card. Velasio De Paolis, emite este
comunicado sobre el camino de renovación que estamos recorriendo. Nos dirigimos
a todas las personas que han seguido con atención los acontecimientos recientes
en nuestra congregación religiosa y especialmente a nuestros hermanos
legionarios de Cristo, a los laicos consagrados, a las consagradas y a los
demás miembros y amigos del Movimiento Regnum Christi.
2. Ésta es la primera reunión del Capítulo General desde 2005. Siendo el
capítulo la más alta autoridad interna que representa toda la congregación,
hemos visto la necesidad de pronunciarnos sobre los acontecimientos
significativos de los últimos nueve años. Con esto queremos definir de manera
conclusiva la postura de nuestra congregación sobre los comportamientos del P.
Marcial Maciel y su papel de fundador, en continuidad con las disposiciones de
la Santa Sede y con la anterior declaración de todos los superiores mayores de
la Legión de Cristo. Además ofrecemos unas reflexiones iniciales sobre los
puntos más importantes del proceso de renovación de nuestra congregación. Las
próximas semanas, los padres capitulares continuaremos el análisis de los
diversos temas que debemos atender y daremos orientaciones al nuevo gobierno de
la Legión para el camino futuro.
3. Al ponderar la gravedad del mal y el escándalo causado, nos sabemos
bajo la mirada misericordiosa de Dios que con su providencia sigue guiando
nuestros pasos. Uniéndonos a Jesucristo esperamos poder redimir nuestra
historia dolorosa y vencer con el bien las consecuencias del mal. Sólo así
podemos encontrar sentido evangélico a lo sucedido y construir nuestro futuro
sobre los sólidos fundamentos de la confianza en Dios, la fidelidad a la
Iglesia y la verdad.
4. Desde esta perspectiva hemos considerado los comportamientos
gravísimos y objetivamente inmorales del P. Maciel que merecieron las sanciones
que en su momento la Congregación para la Doctrina de la Fe justamente le impuso.
Nuestro fundador falleció en 2008 y suplicamos para él la misericordia de Dios.
Al mismo tiempo queremos expresar nuestro hondo pesar por el abuso de
seminaristas menores de edad, los actos inmorales con hombres y mujeres
adultos, el uso arbitrario de su autoridad y de bienes, el consumo desmesurado
de medicamentos adictivos y el haber presentado como propios escritos
publicados por terceros. Nos resulta incomprensible la incoherencia de seguirse
presentando durante décadas como sacerdote y testigo de la fe mientras ocultaba
estas conductas inmorales. Todo esto lo reprobamos firmemente. Nos apena que
muchas víctimas y personas afectadas hayan esperado en vano una petición de
perdón y de reconciliación por parte del P. Maciel y hoy queremos hacerla nosotros,
expresando nuestra solidaridad con todas ellas.
5. Los padres capitulares hemos escuchado la manera en que los
superiores mayores de la congregación han ido conociendo estos aspectos
escondidos de la vida de nuestro fundador, cómo intentaron discernir la
respuesta que había que dar, teniendo en cuenta las exigencias éticas y
morales, y cómo han llevado a cabo el proceso de comunicación. Junto con ellos,
hoy reconocemos con tristeza la incapacidad inicial de creer los testimonios de
las personas que habían sido víctimas del P. Maciel, el largo silencio
institucional y, más adelante, los titubeos y errores de juicio a la hora de
informar a los miembros de la congregación y a las demás personas. Pedimos
perdón por estas deficiencias que han aumentado el dolor y desconcierto de
muchos.
6. Debido a estos hechos y situaciones, nuestra congregación religiosa
habría podido desaparecer si no nos hubieran acompañado la misericordia de Dios
y la solicitud materna de la Iglesia, expresada a través de las intervenciones
decididas de Su Santidad Benedicto XVI. El Papa consideró que la Legión de
Cristo, en términos generales, era una comunidad sana, pero había que hacer
correcciones. La ayuda de la Santa Sede fue imprescindible para descubrir cómo
la personalidad y el modo de actuar del P. Maciel estaban afectando a nuestra congregación
religiosa. De hecho, la Visita Apostólica – realizada, por mandato del Papa,
entre 2009 y 2010 – comprobó que “la conducta del P. Marcial Maciel ha causado
serias consecuencias en la vida y en la estructura de la Legión, hasta el punto
de hacer necesario un camino de profunda revisión” . Los visitadores señalaron
sobre todo tres campos: la redefinición del carisma, el ejercicio de la
autoridad y la adecuada formación . El Papa ha querido “acompañar, sostener y
orientar este camino” por medio de un Delegado suyo, “confiriéndole el encargo
de gobernar en mi [su] nombre tal Instituto Religioso durante el tiempo que sea
necesario para completar el camino de renovación y conducirlo a la celebración
de un Capítulo General Extraordinario, que tendrá como fin principal llevar a término
la revisión de las Constituciones”.
7. Los padres capitulares escuchamos los informes del Delegado
Pontificio y de nuestro Pro-Director General sobre el trabajo realizado en
estos tres años y medio. Queremos compartir sintéticamente el análisis de
algunos aspectos relativos a lo que la Visita Apostólica había detectado y
recomendado. Sabemos que éste es el inicio de un camino y que nos queda mucho
por hacer. Estamos comprometidos a continuar con humildad este proceso de
renovación y conversión.
Fuente: http://capitulogeneral.legionariosdecristo.org/